Si estás pensando en hacer una modificación en tu cocina, te entiendo perfectamente. A veces, ajustar las cosas a nuestras necesidades significa hacer pequeños cambios, incluso en materiales tan duraderos como el cuarzo. El cuarzo es un material que combina naturalidad con durabilidad, formado por aproximadamente un 90% de cuarzo natural y un 10% de resinas y pigmentos.
Puede parecer complicado hacerle agujeros debido a su resistencia, pero no es imposible. Los profesionales utilizan herramientas de corte específicas, como taladros con brocas diamantadas, para evitar dañar la superficie. Recuerdo cuando un amigo decidió instalar una encimera de cuarzo y necesitaba hacer un agujero para un grifo adicional. Contrató a un experto, y en menos de una hora, el trabajo estuvo impecable.
Una de las grandes ventajas del cuarzo es su bajo mantenimiento. Sin embargo, su dureza, que alcanza un 7 en la escala de Mohs, también significa que cualquier modificación debe hacerse con cuidado para evitar grietas o roturas. En mi experiencia, he visto cómo encimeras mal perforadas terminan con fisuras, lo que incrementa los costos de reparación significativamente.
Algunos fabricantes ofrecen servicios de personalización y ajustan tus necesidades directamente desde la fabricación, lo cual puede resultar más económico que modificar la encimera in situ. Sin embargo, si decides hacerlo por tu cuenta, es esencial contar con las herramientas adecuadas y, si es posible, la asesoría de un profesional. Las encimeras de cuarzo no son solo una tendencia de diseño moderno, sino también una inversión que, con el cuidado correcto, puede durar décadas.